Una actitud amargada, sin esperanza. Un prisionero.
Acento latinista.
La innecesaria virtud que caracterizaba al sufrido personaje, recordaba el detalle mas mínimo, por defecto. De un simple y corriente percance ha perdido y ganado todo.
Pero en la contrariedad del relato se muestra a un soberbio e incomodo agradecido. Que se mantiene del recuerdo, pero, no soporta la inercia del físico.
Tras la limitación de sus movimientos, distinto a la memoria, la cual no halla fin ni al mínimo detalle.
Según la indicación, la reflexión.
De no tener el privilegio de olvidar a tener la fortuna de no olvidar.
el olvido es necesario pero el recuerdo de cada detalle es absurdamente tan innecesario como preciado.
"...el «cronométrico Funes»."
personaje "con ciertas incurables limitaciones."
Una actitud amargada, sin esperanza. Un prisionero.
Acento latinista.
La innecesaria virtud que caracterizaba al sufrido personaje, recordaba el detalle mas mínimo, por defecto. De un simple y corriente percance ha perdido y ganado todo.
Pero en la contrariedad del relato se muestra a un soberbio e incomodo agradecido. Que se mantiene del recuerdo, pero, no soporta la inercia del físico.
Tras la limitación de sus movimientos, distinto a la memoria, la cual no halla fin ni al mínimo detalle.
Según la indicación, la reflexión.
De no tener el privilegio de olvidar a tener la fortuna de no olvidar.
el olvido es necesario pero el recuerdo de cada detalle es absurdamente tan innecesario como preciado.